La vida de San Elzeario de Sabrán (c. 1285–1323) es un notable ejemplo de cómo la santidad franciscana puede florecer en medio de la nobleza, la vida cortesana y el matrimonio. Junto con su esposa, la Beata Delfina de Signe, es uno de los modelos más bellos del compromiso laico en la fe.

• Vida de Nobleza y Misión: Nacido en Provenza, Francia, en el seno de una familia noble, Elzeario heredó el condado de Ariano (en Nápoles). Desempeñó importantes misiones políticas y militares al servicio de la Casa de Anjou, incluyendo la embajada ante el rey de Francia. En el mundo, brilló por su destreza en las armas y su prudencia en el gobierno de sus vasallos.

• Matrimonio Virginal y Tercera Orden: Siendo muy joven, se casó con Delfina de Signe por voluntad real. Ambos, por mutuo acuerdo y profundo amor a Dios, vivieron su matrimonio en castidad virginal. Para santificar su estado y orientar su vida, ambos vistieron el hábito de la Tercera Orden Franciscana (OFS).

• Caridad en la Opulencia: A pesar de su riqueza, vivieron un espíritu de pobreza franciscana. Elzeario gobernó su condado con sabiduría y justicia, y junto a Delfina, se dedicó a la caridad, distribuyendo abundantes limosnas. Se destacó especialmente por su amor y servicio a los leprosos, a quienes visitaba diariamente.

Muerte y Canonización Extraordinaria

La muerte de Elzeario ocurrió mientras cumplía una misión diplomática, y su canonización fue singular:

• Muerte en Servicio: San Elzeario murió en París el 27 de septiembre de 1323, a la edad de 38 años, mientras estaba al servicio del rey de Nápoles en una embajada ante la corte francesa.

• Conocimiento Místico de la Muerte: La Beata Delfina conoció su muerte misteriosamente, antes de recibir el correo oficial del rey Carlos IV. Este conocimiento místico subraya la profunda unión de las almas de los esposos.

• Milagro de la Canonización: La santidad de Elzeario fue tan evidente que el proceso de canonización fue inusualmente rápido para la época. Fue canonizado por el Papa Urbano V el 1 de abril de 1369. El Papa Urbano V era Guillermo de Grimoard, quien había sido ahijado de San Elzeario. Este hecho, que el Papa fuera el ahijado del santo, es un testimonio único de la impresión que la vida de Elzeario dejó en quienes lo conocieron. Se le atribuyen muchos milagros después de su muerte.

Legado para el Laico Franciscano

San Elzeario, celebrado junto con su esposa Delfina, es el gran patrón del laico que vive en el mundo:

• Santidad en el Matrimonio: Demuestra que la más alta santidad y radicalidad evangélica (como la castidad virginal) es posible dentro del sacramento del matrimonio, vivida en perfecto acuerdo y mutua emulación de la virtud.

• Compromiso Social: Su vida enseña que el terciario franciscano debe ejercer su influencia en el mundo (nobleza, política, milicia) con espíritu de justicia y caridad, gobernando con sabiduría y sirviendo a los más marginados (los leprosos).

Nota Litúrgica

A San Elzeario de Sabrán y la Beata Delfina, esposos (cuya fiesta se celebra el 26 o 27 de septiembre), se les reserva la celebración de Memoria Obligatoria para la Familia Franciscana (TOR y OFS), reconociendo su papel fundacional en la santidad matrimonial de la Tercera Orden.